sábado, 7 de agosto de 2010

notas



Esta banda ya tiene más tiempo aparte de este disco. Son de ese sonido de guitarras distorsionadas pero que a la vez suenan bastante limpias. Se presentan en vivo disfrazados de enfermeros, con sus tapabocas y sus mamelucos azules. Experimental o no, son atomosféricos, son todo un estado de ánimo. Ade Blackburn, para mi, es una de las voces más raras del medio, y basta de mencionar el feeling o su parecido a Thom York; últimamente (pobres gentes) todo el mundo se parece a Thom York, o últimamente se deja ver la inteligencia haciendo referencias estúpidas.
Ya tienen sus buenos 10 años, y para los que quieran ser áun más interesantes pueden poner esto en su biblioteca.





Pues Jamie Stewart se puso a elegir unas buenas canciones y les puso su sello particular. Nina Simone en chello; Nedelle con su voz doliente y una de Bauhaus con un final enorme y fuerte. Es un ep, pero uno de esos que se escuchan como si fuesen un disco. Y podrían ser definido como otra faceta del dueto, una triste (como siempre) pero más asequible, una sin las complejas percusiones del gamelan.




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